Sigue el aumento de emprendedores gastronómicos que se aventuran en proyectos hosteleros de calidad, lo que supone un soplo económico importante para el país así como un respaldo al excelente trabajo que grandes chefs están realizando para dar visibilidad internacional a la profesionalidad que desde hace años se viene asentando.

Cada vez somos más conscientes de que un buen profesional ha de formarse de continuo, que el servicio de hostelería que hay en España destila competitividad, que nos representan productos de calidad sabrosos y económicos, por lo que no entiendo como puede ser que, con toda esa caballería gastronómica a cuestas, no seamos capaces de mantener abiertos restaurantes de nueva creación por largas temporadas, pero sobre todo, no entiendo por qué aún no tenemos implantado el marketing gastronómico en la mayoría de nuestros restaurantes, ¿tú si lo entiendes?

Es importante incorporar la “venta sugestiva” como una forma de trabajo entre todo el equipo de trabajo con sencillas prácticas de excelente resultado como son:

  1. Haz partícipe al equipo de los productos y platos de la carta, tanto como parte de su formación y motivación, como por ser la mejor forma de vender un plato, haberlo disfrutado.
    Ejemplo: Haz cómplices al equipo de la carta del restaurante dándoles a probar cada plato de la misma, e invierte tiempo en informarles de los productos de temporada que se utiliza en cada plato así como los beneficios de estos; no hay nada más creíble que una recomendación y esto es lo que debería hacer tu equipo al sugerir la carta del restaurante, recomendarla y no venderla.
  1. Adereza cada plato a la hora de sugerirlo; la misma profesionalidad y creatividad que ponen en la cocina al decorar un plato, deben utilizarla al sugerirlo.
    Ejemplo: 
    – Salmón fresco con verdura de guarnición.
    – Lomo de salmón sobre volcán de tallarines y verduritas salteadas.
    ¿Con qué plato te quedarías tú?
  1. Acompaña el plato fuerte con una bebida de maridaje; el hostelero es consciente de que la bebida es el producto que mayor rentabilidad tiene el restaurante, sin embargo pocas veces juega esta baza.
    Ejemplo: El segundo plato es el compañero ideal de un licor y o macerado propio de la casa, ya sea como bocado final o como acompañamiento, lo cual supondrá  parte de la experiencia sensitiva que estén viviendo, además de publicitar una carta de cócteles propia y única que podrán disfrutar después del postre. Una forma de promocionar una parte importante de la carta, de diferenciarte con un producto propio y de potenciar la experiencia del cliente de manera gratuita. ¡mejor imposible!
  1. Conoce a tu clientela, estúdiala y cuando conozcas las razones por las que comería en tu restaurante o lo referiría, planifica las campañas publicitarias.  
    Ejemplo: Es un error muy común crear las promociones en base a porcentajes de beneficio, al ego u orgullo de querer dar a conocer su negocio o de lanzar campañas pasajeras como son las de 2×1.

No olvides que tus clientes son personas y por tanto actúan por impulso, sentimientos o necesidad en la mayoría de los casos, es decir, a través del hemisferio derecho del cerebro, donde residen las emociones, mientras que tú utilizas el hemisferio izquierdo del cerebro, donde reside la razón y la lógica, para crear campañas comerciales que esperas te traigan muchos clientes … no realices una campaña publicitaria, sino de seducción y emoción.

Igual que buscas a un buen profesional en la cocina delega en un experto el trabajo de marketing gastronómico y verás pronto el resultado positivo que esperabas.

Si quieres conocer más trucos no dudes en ponerte en contacto con nosotros, ¡tus objetivos son nuestros retos!

Helena Olcina